Las claves decorativas de un hotel de lujo

Las claves decorativas de un hotel de lujo

¿Cuántas veces hemos paseado por alguna calle céntrica y de repente nos hemos encontrado con una imponente fachada? Esta es una experiencia que nos pasa a todos, entonces decides pararte y contemplar la riqueza de un mural que desde luego esconde algo igualmente imponente. Esto es lo que ocurre con los hoteles de lujo repartidos por todo el mundo. Lugares destinados a transmitir una imagen de elegancia, de durabilidad en el tiempo y sobre todo de mucha clase. Hoteles que cuidan hasta el más mínimo detalle para hacer de él un verdadero museo para el uso y disfrutes de sus huéspedes y visitantes. De esto sabemos mucho en Muebles Picó. Y es que desde el año 1945 somos diseñadores y fabricantes del lujo y la elegancia. Una marca que se encuentra a la vanguardia del mueble en todo su proceso productivo, con alta tecnología, controles de calidad y una excelente gestión medioambiental. La riqueza que nuestros muebles pueden ofrecer no se centra únicamente en viviendas particulares. Hacemos proyectos de instalaciones de alto nivel tanto para residencias privadas, como para instituciones oficiales, oficinas y hoteles. Trabajamos con total personalización, siempre con las mejores materias primas y acabados. Y de riqueza mobiliaria saben mucho en los hoteles de lujo. La decoración de un hotel de lujo se marca por su grandiosidad decorativa, engrandeciendo aún más el espacio. Pero, ¿qué caracteriza la decoración de un hotel de lujo? A lo largo de estas líneas vamos a darte todas las claves para que puedas identificarlos.

Empecemos por el exterior: una fachada imponente

Es la primera toma de contacto con el hotel y ya habla por sí sola. Una parte imprescindible en la decoración de un hotel de lujo suelen ser sus fachadas. Clásicas, minimalistas o modernas, el estilo es indiferente pero si algo tienen en común es su aspecto colosal y su sensación de imponencia. La apuesta suele ser con materiales sostenibles y con el aislamiento térmico, solar y acústico necesario. Las fachadas de los hoteles de lujo incluyen grandes puertas acristaladas y balcones que le otorgan elegancia al conjunto. Y tras ellas otra joya de la corona, las entradas o vestíbulos. Estos espacios se caracterizan por mostradores imponentes, decorados con sofás de excelentes materiales, alfombras y lámparas imponentes. Completa el conjunto un mobiliario sofisticado en madera natural, dando calidez y elegancia.

Pasemos al interior: lujo y sofisticación

Si el exterior es imponente cuando accedemos al edificio damos buena cuenta de la grandiosidad. La increíble decoración de un hotel de lujo es su sello de identidad, un hecho que marca la diferencia. Más allá del vestíbulo, que es la primera toma de contacto una vez accedemos al reciento, las estancias que definen a un hotel de este calibre son sus habitaciones.

El lujo a la hora de dormir

Los dormitorios son las estancias principales, un espacio que debe contribuir al descanso y la paz de los clientes. Las habitaciones cuentan con amplios espacios, muebles exclusivos o piezas decorativas de diseño. No se renuncia a la elegancia en ninguna estancia, y es que los baños son tratados con el mismo decoro. Cuentan con muebles de madera, luz cálida, amplitud y todo cuanto puedes necesitar.

Las puertas de paso

Otro elemento que caracteriza la decoración de un hotel de lujo es sin duda alguna sus puertas. No son puertas sencillas, de materiales débiles. En estos casos, la función la cumple con un diseño hermoso, sin olvidar la solidez y la calidad de sus materiales. Puertas personalizadas que dan seña de identidad a la decoración de un hotel de lujo. Este tipo de puertas, personales e inimitables dan seriedad y elegancia al conjunto del hotel. Las puertas de Muebles Picó se realizan con materiales de primera calidad, con madera noble como el roble, el nogal o el cerezo, o metálicas muy a la vanguardia, predominando el hierro, el vidrio y el cristal.

La decoración: natural y viva

Sin duda alguna otra característica de la decoración de un hotel de lujo es su sensación permanente de estar vivo en el tiempo. Para ello, estos edificios emplean una ornamentación basada en la vegetación y el agua. Ambos elementos consiguen darle al espacio un toque natural, fresco y muy vivo. La vegetación se encuentra presente tanto en los muebles de las habitaciones, recibidores, fachadas o estancias comunes como el comedor, pero también caen dese paredes y techos dando una sensación de naturaleza.  
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